Atado a un trapecio al revés, Tibor Wolf ve llegar a David Anthony y Spencer Reed ya con la polla tiesa. En este momento, toma una respiración profunda, porque sabe que va a tomar por el culo y por la boca. Pero lejos de quejarse, esta putilla bien adicta a las pollas disfrutará de cada una minutos más adelante. Colmado por golpes de polla, regado de orina, enculado salvajemente, para el tipo no es lo suficiente ! Es con una amplia sonrisa que se aparta las piernas para dejar entrar el puño en su pequeño culo ya muy abierto antes de correrse encima y dejarse follar una vez más por un gran consolador.
